El Papa reiteró la necesidad de «poner fin a las guerras en Palestina y en muchos otros lugares del mundo»

El Papa reiteró la necesidad de «poner fin a las guerras en Palestina y en muchos otros lugares del mundo»

Después del Ángelus de la Edad Media a la multitud que lo aclamó en la Plaza de San Pedro, desde el balcón de su estudio privado en el Palacio Apostólico Vaticano, el Papa Reiteró la necesidad de «poner fin a las guerras en Palestina y en muchos otros lugares del mundo».

Poco después, en una audiencia de la Red Internacional Legisladores Católicos, Francisco afirmó «el imperativo de renunciar a la guerra como medio para resolver conflictos y restaurar la justicia».

Afirmo que “la enorme capacidad destructiva de los armamentos contemporáneos”. hecho obsoleto los criterios tradicionales para limitar la guerra”.

El pontífice argentino informó esto “La distinción entre objetivos militares y civiles es cada vez más borrosa”. Nuestras conciencias no pueden evitar conversar con las escenas de muerte y destrucción que vemos ante nuestros ojos todos los días”.

“Necesitamos examinar la valentía de la gente, las vidas y los corazones de quienes leen la Biblia, para ver la profundidad del mal que está incrustado en el corazón de la guerra y decidir que todos los medios elijan la paz”.

A los parlamentarios católicos del mundo, acompañado por el cardenal Christoph Schoenborn, Francisco definió el tema de este año como es “El mundo en guerra: crisis y conflictos permanentes”.

Jorge Bergoglio afirmó que “significa para nosotros la situación actual de una “tercera guerra mundial liberada poco a poco, que parece permanente e imparable”.

“La crisis actual afecta enormemente a los pacientes con los esfuerzos realizados por la comunidad internacional, en particular a través de la diplomacia multilateralfomentar la cooperación, abordar las graves injusticias y los gratificantes desafíos sociales, económicos y ambientales que enfrenta la familia humana”.

Francisco señaló que “la respuesta que se espera no es sólo de los legisladores, sino también de todos los hombres y mujeres de buena voluntad, en particular aquellos inspirados por una visión evangélica de la unidad de la familia humana y por su vocación de construir un mundo caracterizado por la fraternidad, la justicia y la paz”.

Bergoglio eliminó la necesidad de perseverancia y paciencia, “virtud proverbial de los luchadores”para continuar el camino de la paz.