El organismo electoral de Bolivia reconocimiento como presidente del gubernamental Movimiento Al Socialismo (MAS) por parte de un dirigente del gobierno de Luis Arce en compensación a un fracaso constitucional, el que ratificó que el exgerente Evo Morales (2006-2019) ha dejado de ser el máximo dirigente de este partido después de casi tres décadas.
El líder campesino Grover García confirmó a los medios que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) «Sí, lo reconozco» un congreso del partido organizado en mayo por organizaciones sociales cercanas al Gobierno en el que fue elegido presidente del MAS en sustitución de Morales.
«Se hace justicia para las organizaciones sociales. Ahora nuestra herramienta política pasó a manos de las organizaciones sociales», afirmó.
García se declaró «feliz y privilegiado» porque las organizaciones confían en la directiva nacional del partido que, aseguró, liderará junto al ‘pacto de unidad’ que conforman los sindicatos de agricultores, indígenas y trabajadores afines al Ejecutivo.
También indica que requerirá «que la directiva saliente» únete a los talleres de fiesta y que «dejen informes como confirme» conforme a lo establecido en el estado y los reglamentos del partido.
«De lo contrario, por eso mismo, hacer que las cosas sucedan», añadió.
Hace dos semanas, los magistrados del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) emitieron un fallo que validó el congreso del MAS realizado por el bloque oficialista «arcista» o cercano a Arce en mayo pasado en la ciudad de El Alto, cerca de La Paz.

Este congreso fue luego de que otros fueran al cabo la facción ‘evista’, los leales a Morales, en octubre de 2023 en el Trópico de Cochabamba (centro), el bastión político y sindical del ex presidente.
Arce y el vicepresidente del país, David Choquehuanca, no asistieron al congreso de Trópico al considerar que las organizaciones sociales que cumplen con el MAS no están debidamente representadas.
En el congreso ‘evista’, Morales fue reinstalado como líder del MAS y fue proclamado su «candidato único» para las elecciones presidenciales de 2025.
El TSE no es válido para ninguno de los congresos e instó a ambos bloques del oficialismo a realizar una reunión partidaria en «consenso», sin embargo y sin precedentes.
El bloque de Morales se comprometió en varias ocasiones a realizar su propio congreso en el trópico de Cochabamba, pero ante la negativa del organismo electoral a supervisarlo, esos encuentros terminaron en simples reuniones partidistas.
Ambas gordas activar recursos legales buscando el reconocimiento de sus respectivos congresos y finalmente el TCP ha validado el sector depurado del Gobierno.
Los magistrados que validaron el congreso de los ‘arquistas’ son los mismos que recientemente emitieron una sentencia indicando que las autoridades electas en los poderes legislativo, ejecutivo y judicial es posible realizar la operación sólo por dos períodos, continuo o discontinuo.
Esto influyó en las intenciones de Morales de postularse para Presidente, por lo que ya ha gobernado Bolivia en tres ocasiones (2006-2009, 2010-2014 y 2015-2019).
Durante una reunión en el Trópico de Cochabamba, los afines de Morales definieron la semana que transcurrió en La Paz en defensa de la candidatura política y la ratificaron como presidenta del MAS.
Las peleas por la candidatura presidencial y el control del MAS agravaron la división dentro del oficialismo, que viene de las finales de 2021 entre la distancia entre Morales y Arce.