Feijóo se teme lo peor, es decir, que Pedro Sánchez ceda ante los independentistas y conceda la amnistía y el referéndum de autodeterminación, pero no se quedará quieto. El poder territorial que tiene el PP tras el 28 de mayo, y la mayoría absoluta en el Senado, además de ser la fuerza más votada en el congreso, la pondrá el presidente del PP en marcha.
La iniciativa anunciada por Alberto Núñez Feijóo ante la dirección nacional del PP, durante la reunión de la junta directiva nacional, es hacer votar en todas las instituciones, Congreso, Senado, parlamentos autonómicos y plenos de ayuntamientos y diputaciones. Mociones o iniciativas en las que tendrán que votar a favor de la igualdad de todos los españoles «o de los privilegios a los políticos independentistas», que es lo que a juicio del PP supone la amnistía, y a favor «de la unidad de todos los pueblos de España o a favor de la ruptura».
«Ningún político de este país va a poder ocultar su opinión», dice Feijóo
El objetivo es sencillo: «Ningún político de este país va a poder esconder su opinión», a pesar de que el PSOE quiere callar a dirigentes socialistas como Felipe González o Alfonso Guerra, que están en contra de lo que está haciendo Pedro Sánchez, y pretende que no se escuche a los «cientos de miles de españoles» que consideran que «les han votado, pero no para lo que quieren hacer».
En su discurso ante el máximo órgano del PP entre congresos, Núñez Feijóo subrayó que ni al PSOE ni al PP les han votado «para renunciar a nuestros compromisos a cambio de poder», y ni en el PP ni el PSOE «han pedido el consentimiento para quebrar los valores democráticos, para romper con la igualdad de los ciudadanos ante la ley, y no han dado su consentimiento para demoler el estado de derecho a cambio de unos solos votos».
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«No hay consentimiento de los españoles -insistió- para que España deje de ser una nación» y por eso no sólo hará esas iniciativas en todas las instituciones del estado, sino que Alberto Núñez Feijóo está dispuesto a utilizar «si hace falta», la «vía judicial» para «impedir estos despropósitos». Si mensaje a los españoles que «sepan que habrá respuesta al desafío separatista».
Y desde el punto de vista político, el mensaje de Feijóo a los españoles es que si el gobierno de España depende de Puigdemont «es porque lo quiere el PSOE», porque tiene otra opción, la de hablar con el PP, «el primer partido tras las elecciones». Sánchez no quiere, por eso está en manos de Puigdemont, porque «ha pasado de dirigir un PSOE que aprobó un 155», a ceder a la pretensión de l ex president de la Generalitat de «hacer él un 155 inconstitucional, con el que intervenir el gobierno de España» para dejar sin efecto «la Constitución y el estado de derecho».
Feijóo cree que Junts y ERC están en una carrera a ver «quien humilla más a España»
También advirtió Feijóo contra la carrera entre Junts y ERC para exigir cosas a Sánchez, a ver «quien humilla más al estado» compitiendo a ver quien exige más «poniendo precios que a Sánchez nunca le parecen demasiado altos», y lo peor, aseguró, es que «nos tememos que Sánchez dirá que sí a los que piden la humillación de la nación».
Frente a esta situación, y pese a que su investidura todo indica que será fallida, Feijóo la defendió, porque con ella, a su juicio, «se ha iniciado el camino que nos llevará al gobierno de España, ahora o pronto», pero el PP lo hará «sin subastas ni atajos ni engaños, ni acatando lo que imponga la minoría», sino que llegará al Gobierno «defendiendo la igualdad y los principios que nos unen». Lo hará, subrayó, a través «de la coherencia y el compromiso con los votantes» y defendiendo «los valores de la Constitución», que es «para lo que nos han votado».
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